Mi decisión para presentar esta candidatura surge de la firme determinación para conformar una propuesta que lidere un proyecto de futuro que nos permita avanzar, tomando como punto de partida la situación en la que nos encontramos.
Este compromiso surge del conocimiento de lo que funciona, y también de lo que se podría mejorar, y está basado en el diálogo y la reflexión crítica.
Debemos tener en cuenta que un proyecto que se considere de futuro, no puede definirse como una enmienda a lo realizado que nos haga volver al pasado. Aprendemos de todas las experiencias vividas para proyectar un mundo mejor.
Este proyecto debe tener en cuenta que las condiciones de nuestro entorno y las personas que hacemos la propuesta somos únicas y, por lo tanto, también lo es nuestra capacidad para poner la proa de nuestra institución hacia un futuro que debe ser de todas las personas que formamos parte de ella, y también de la sociedad que nos rodea y en la que nos integramos.
La propuesta que planteamos en esta candidatura es abierta a la participación y al diálogo, integradora y optimista.
Este proyecto no es un plan individual, es una propuesta colectiva que trasciende al equipo que le da soporte. Es el resultado del diálogo con muchas personas que nos han aportado su experiencia y conocimiento.
Expresamos nuestro firme compromiso para conseguir que todas las personas que conforman la comunidad universitaria disfruten de un desarrollo profesional óptimo. Quienes trabajan en la UC deben hacerlo de la forma más cómoda y eficiente. Estamos convencidos de que son las personas las que han conseguido que la UC sea lo que es hoy, y serán las personas las que nos proyecten hacia un futuro que nos consolide como una institución pública de referencia. Si tenemos éxito en esa tarea, nuestra universidad seguirá siendo el motor de desarrollo que contribuirá al crecimiento y bienestar de nuestra sociedad. Debemos seguir siendo ese ascensor social que permita a cada persona alcanzar metas en base a sus capacidades, sin que estén condicionadas por su origen socioeconómico y sus características individuales.
El factor humano debe ser el elemento central de todas las políticas. La salud y el bienestar de la comunidad universitaria, tanto a nivel físico como emocional, son elementos clave en la vida de la institución.
Nos comprometemos a construir una universidad que sea referente por su compromiso con lo individual, en el respeto a la igualdad, la inclusión y la participación. Desarrollaremos políticas innovadoras para luchar contra las brechas de género.
Estamos convencidos de que la sostenibilidad debe ayudarnos a entender mejor el mundo que nos rodea, a ser más respetuosos con las personas y los recursos. Debemos conseguir que las nuevas generaciones se formen en las competencias profesionales y personales que les habilitarán para mejorar la sociedad del futuro. Somos ambiciosos en cuanto al papel tiene que jugar nuestra institución como elemento transformador.
Nuestra universidad debe seguir haciendo docencia, investigación y transferencia de la máxima calidad, simplificando procedimientos para conseguir que el talento de las personas se focalice en los aspectos más relevantes. Desarrollaremos una estrategia digital transversal que de soporte a todas las actividades que realizamos.
Asumimos el reto de conseguir una gobernanza de la institución basada en la participación, el rigor, el gobierno eficiente y ético de los datos, y la búsqueda de un equilibrio adecuado entre la rendición de cuentas y la gestión ágil y flexible. Fortaleceremos los mecanismos de transparencia.
Nos comprometemos a crear puentes con otras instituciones nacionales e internacionales de referencia, a construir una universidad abierta al mundo, atenta al cambio, en el que la internacionalización y la construcción de redes sea un elemento básico. Hay que competir con garantías en una sociedad global en lo geográfico, económico y multicultural.
Tenemos un compromiso de colaboración leal con el resto de instituciones. Estas alianzas expresarán el apoyo de la sociedad para disponer de las personas y los recursos que permitan hacer frente a los retos del futuro. Esos retos, definidos por el marco legal vigente, deben materializarse en un proyecto ambicioso, integrador, inclusivo y participativo.
Con este espíritu, y en diálogo participativo con toda la comunidad universitaria, abordaremos desde el consenso la redacción de los nuevos estatutos. Iniciamos un nuevo ciclo en el que diseñaremos e implementaremos un plan estratégico que establezca las líneas maestras de la universidad que queremos.
Los objetivos de este programa se articulan en un plan de acción para abordar los próximos seis años, en el que todas las personas se sientan partícipes. El futuro es colectivo y debe implicar a toda la comunidad universitaria.
Animamos a quienes formáis parte de este proyecto colectivo que es la UC a uniros a esta propuesta ilusionante para su futuro, que es también el tuyo. Necesitamos vuestra experiencia, vuestro conocimiento y vuestro compromiso para seguir siendo referentes del desarrollo social y económico de Cantabria, y ser líderes en los contextos nacional e internacional.